viernes, 5 de noviembre de 2010

Centro se prepara para diciembre

Foto de Óscar Berrocal.
El agua ha terminado espantando a más de uno y por eso el movimiento comercial del Centro no ha estado en su mejor momento como en años anteriores. Esa es la principal explicación que los comerciantes de esta zona de la ciudad dan al calificar de ‘quietas’ las ventas de este 2010. Sin embargo, con la llegada de noviembre, y la cercanía de diciembre, esperan remontar la situación. “Esperemos que dentro de diez días, el panorama cambie”, dice Dina Luz Pardo, directora de Asocentro.

Entre las actividades que los centros comerciales y los grandes almacenes preparan desde ya para diciembre están las caravanas por la ciudad para dar a conocer su mercancía, las novenas navideñas para niños y un mayor énfasis en el perifoneo, habitual en estos almacenes para invitar al transeúnte a comprar. Las promociones tampoco faltarán porque “es falso que se incrementen los precios para la temporada”, dice Carlos Peláez, un comunicador que dejó los medios para dedicarse de lleno al comercio.

Los comerciantes esperan que, como tradicionalmente ha sido, las ventas aumenten después de la primera quincena de noviembre porque “comienzan los grados y la gente a comprar sus cosas para diciembre”, explica Peláez.

Unas 250 mil personas visitan a diario el Centro, según cálculos de Asocentro. Llegado diciembre la cantidad se duplica.  Es decir, entre unas 550.000 y 600.000 personas”, asegura Pardo. 

Foto de Óscar Berrocal.

La clientela del Centro no sólo está conformada por barranquilleros. Ramiro Zuluaga, comerciante y dueño de varios centros comerciales, dice que no faltan los residentes de los pueblos que viajan en busca de su ropa decembrina. “Podemos decir que el 95% de los barranquilleros compran su ropa aquí y de los pueblos afirmaríamos que el 100%”, explica Zuluaga.
Tampoco faltan los mayoristas que acuden al Centro para surtir sus negocios, localizados en los barrios y otras zonas de la ciudad.

Zuluaga estima que entre los 15 y 30 de noviembre, las ventas se incrementan en un 50% con relación al resto del año, mientras que durante diciembre pueden alcanzar hasta un 400% de incremento.

En almacenes de 12 metros cuadrados que, en temporada regular, contratan tres empleados, llegan a necesitar seis personas más para poder dar abasto con la clientela. “Eso usted aquí ve cómo la gente hace fila para poder entrar a cada almacén y comprar su ropa”, continúa Zuluaga.

Asocentro espera que las ventas de la temporada decembrina superen en un 10% las del año anterior, pese a considerar este año como uno de los más complicados en ventas recientemente.
Los millones que movió el Centro en diciembre sólo se conocerán en enero de 2011 con base en los reportes que los comerciantes le entreguen a la Dian y a la Secretaría de Hacienda del Distrito.

Asocentro enumera entre las razones que le han devuelto vida comercial al Centro la seguridad que impera durante el día gracias al programa Zonas Seguras, liderado por los comerciantes en asocio con la Policía; el avance de los almacenes en su infraestructura, especialmente en las vitrinas; los precios bajos, y la calidad de la mercancía.

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